El 19 de febrero de 1950, el Betis había sido goleado por 6-0 en el campo del Ceuta. Una semana después, el 26 de febrero, iba a ser el conjunto verdiblanco el que iba a endosar un 6-0 al Cacereño, en la 26ª jornada del Grupo V de la Tercera División 1949/50.
En su tercera temporada en Tercera División, el Betis llevaba una marcha irregular. Los equipos norteafricanos, el Melilla y el Ceuta, lideraban la clasificación del Grupo V, mostrándose más fuertes que sus perseguidores, entre los que se encontraba el Betis. El rival de la jornada 26, el Cacereño, ocupaba los puestos bajos de la tabla y aún no había ganado fuera de casa (solo había arrancado dos empates en Algeciras y Cádiz), por lo que el encuentro se preveía cómodo para los béticos.
Andrés Aranda dispuso el siguiente once: Salinas, Máximo, Fausto, Pulido, Paquirrini, Esteban, Espina, Regatero, Hidalgo, Villarín y Peña.
El Cacereño salió con la siguiente alineación: Gari, Rodríguez, Ortega, Caro, Trella, Cabal, Guío, Contreras, Moreno, Navarro y Paquito.
Goles:
1-0: Villarín.
2-0: Hidalgo.
3-0: Pulido, de penalti.
4-0: Pulido, de penalti.
5-0: Regatero.
6-0: Hidalgo, de cabeza.
Pitó el granadino Rodríguez Morales, que dirigió un encuentro fácil de arbitrar.
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| ABC de Sevilla, martes 28 de febrero de 1950 |
A pesar de la victoria, el Betis no pudo recortar puntos a sus perseguidores, pues tanto el Melilla (0-2 ante el España Tánger) como el Ceuta (0-4 ante el Larache) vencieron a domicilio.
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