Si la temporada liguera había terminado con la mayor catástrofe deportiva de la historia del Betis, descendiendo a Tercera en Santander el 13 de abril de 1947, la actuación en Copa, disputada tras el campeonato doméstico, no pudo ser más diferente. A las órdenes de Peral, el recién descendido Betis eliminó en primera ronda al Deportivo de la Coruña, también recién descendido, pero de Primera a Segunda. La diferencia de categoría no se notó entre béticos y coruñeses: el Deportivo había vencido por 1-0 en la ida, pero el Betis remontó en Heliópolis con un contundente 3-0.
Ya en 1/8 de final, el sorteo deparó una eliminatoria Real Betis-Real Madrid. Los blancos habían cuajado una mala temporada en Liga, terminando en 7ª posición. El conjunto verdiblanco iba a ser eliminado por el equipo de la capital, pero consiguió darle un buen susto al Madrid que, finalmente, se proclamaría Campeón de la Copa del Generalísimo 1947.
El encuentro de ida se disputó el 4 de abril de 1947 en Heliópolis, con el campo a reventar de aficionados béticos.
El Betis jugó este encuentro con Caller, Mariano, Pulido, Máximo, Melito, Coll, Saro, Pineda, Cría, Núñez y Erasmo.
El Madrid jugó con Bañón, Barinaga, Corona, Terán, Ipiña, Huete, Alsúa, Alonso, Pruden, Molowny y Arsuaga.
Goles:
1-0 (minuto 20): Pineda, realizando un gran empalme a pase de Coll.
2-0 (minuto 41): Cría, enviando el balón a la red tras un fallo del Bañón.
3-0 (minuto 70): Cría, con la izquierda, realiza un buen disparo desde fuera del área.
4-0 (minuti 88): Cría, aprovechando un mal despeje del guardameta madridista.
En un encuentro muy completo del cuadro bético, destacó por encima de todos la figura de Cría, delantero del San Fernando cedido en el Betis que realizaba su debut en este encuentro, sin ni siquiera haber realizado ningún entrenamiento con sus nuevos compañeros. Tras intentar sin éxito el regreso de Paquirri, que por entonces jugaba en el Cádiz, el Betis consiguió la cesión de este delantero que no pudo tener mejor debut, marcando 3 goles a todo un Real Madrid. Pineda fue el autor del primero de los 4 tantos béticos. El Madrid, muy inferior durante los 90 minutos, tuvo algunas ocasiones en la primera mitad, por mediación de su delantero centro Pruden, quien no acertó a materializar ninguna.
El 4-0 al Madrid, siendo el Betis ya equipo de Tercera, fue uno de los mejores partidos vistos por Heliópolis en muchos años, ya que llevaba toda la década de los 40' vagando por Segunda División, a excepción de la (pésima) temporada 1942/43 en Primera, para terminar cayendo al pozo de Tercera en 1947.
El partido de vuelta se jugaría en Madrid justo una semana después. El Betis, a pesar de la amplia ventaja, no aprovecharía este resultado y quedaría eliminado por el conjunto madridista.
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